Luego de los enfrentamientos armados que se presentaron en la región, se tomó la decisión de suspender actividades en escuelas y negocios para evitar ser víctimas de la violencia.
Habitantes de los municipios de Ojinaga, Manuel Benavides y Coyame, en modo de prevención, decidieron imponer “toque de queda”.
Varios sujetos armados arribaron a los municipios en mención y desataron enfrentamientos, lo que hasta el momento dejó como saldo cuatro muertos y un herido.